Nueva amenaza para celíacos

¿Te imaginas que lo único que te puede proteger se convierta en tu peor pesadilla? Pues ya está en marcha… ¡Tu mejor aliado puede transformarse en tu peor enemigo! ¿Podremos hacer algo por pararlo…? En este artículo, primero te explicamos brevemente el contexto y por último, la terrible realidad que se nos echa encima. ¡COMPÁRTELO! Necesitamos mover conciencias.

 Un buen aliado del celiaco

Tu enfermedad no tiene ningún otro tratamiento. Lo único que puedes hacer es no consumir nada de gluten, ni siquiera cantidades minúsculas (trazas).

No podrías llevar una vida sana si no pudieras aislar rigurosamente todos tus alimentos.

Por lo tanto, sin lugar a dudas, uno de tus mayores aliados es el plástico de conservación alimentaria. Habitualmente, es la principal barrera que separa tu comida de la omnipresente contaminación con gluten en todos los rincones: fábricas, almacenes, tiendas, restaurantes, comedores escolares, domicilios…

Como dice el especialista en trastornos relacionados con el gluten, el Dr. Luis Rodrigo Sáez, “vivimos rodeados de harina”.

 ¿Vivir sin plástico?

Para ti, prácticamente imposible.

Para ti y para millones de personas en todo el mundo. Un número que aumenta de manera constante.

Los expertos calculan que hasta una sexta parte de la población mundial podría estar afectada por alguno de los diversos trastornos que causa el gluten.

 Plástico y medio ambiente

Como sabes, es una realidad que el plástico se ha convertido en un problema de contaminación medioambiental muy serio. Los microplásticos y nanoplásticos han invadido los ecosistemas. Hay toneladas de plástico en el mar.

Este problema se ha agudizado por los plásticos desechables que no son reciclados. Como consecuencia, la mayor parte acaba en el océano y entra en la cadena trófica.

 Plástico biodegradable

El sector de la alimentación es uno de los que mayores cantidades de desechos genera. Sin duda, los plásticos biodegradables son la mejor opción para nuestro planeta.

Por este motivo, se está investigando en plásticos y films para conservar alimentos a partir de proteínas vegetales o animales, o almidones.

El desarrollo de películas y recubrimientos comestibles y plásticos para conseguir biomateriales está muy avanzado. Su objetivo es la conservación y embalaje tanto de alimentos frescos como procesados.

Y aquí viene el problema. Lo descubrirás en la siguiente sección.

 ¿Sabes cuáles son las principales proteínas con las que se está experimentando?

Si has llegado a leer hasta aquí, seguro que ya lo sospechas: el gluten.

Sus características viscoelásticas son únicas. Además, su disponibilidad mundial y su bajo precio lo convierten en una opción muy barata. Y en este mundo, como bien sabes, lo que le interesa a las empresas son los beneficios económicos con la menor inversión.

La caseína (proteína de la leche) y la soja también se están empleando en investigación, entre otras sustancias. Sus proteínas son muy alergénicas y pueden producir reacciones en una parte de personas. En algunos casos, son mortales sin una atención médica inmediata (shock anafiláctico). También suelen afectar a una parte de celíacos y sensibles al gluten.

 Productos ya presentes en el mercado

Actualmente, ya existen productos en el mercado hechos a base de trigo y cebada.

  • Anillos para los packs de seis latas de cervezas fabricados con los restos de trigo y cebada, procedentes de la elaboración de cerveza. Son utilizados por la empresa Saltwater Brewery, en Florida.
  • Platos, cubiertos, vasos, etc. de plástico hecho con paja de trigo y comercializados por diversas compañías. Si bien es la paja, no el grano, con toda probabilidad contienen contaminación con gluten.
 Naturaleza sin plásticos: Salvemos al planeta… sin condenar a millones de personas

Según la normativa vigente:

Cualquier material u objeto destinado a entrar en contacto directa o indirectamente con alimentos ha de ser lo suficientemente inerte para evitar que se transfieran sustancias a los alimentos en cantidades lo suficientemente grandes para poner en peligro la salud humana, o para ocasionar una modificación inaceptable de la composición de los productos alimenticios o una alteración de las características organolépticas de estos.

Reglamento nº 1935/2004 del Parlamento Europeo y del Consejo

¿Se conseguirá en el caso de plásticos hechos de gluten? ¿Qué cantidades transferidas se considerarán “lo suficientemente grandes para poner en peligro la salud humana”? ¿Cuál será el criterio de corte para esa “salud humana”? ¿Se tendrá en cuenta la de los celiacos y sensibles al gluten, o solo la del resto de la población?

Si ya tenías poco con evitar la contaminación cruzada y elegir alimentos certificados sin trazas, ¿te imaginas añadirle controlar el embalaje? ¿Que no puedas comprar con tranquilidad ni siquiera alimentos envasados libres de gluten por naturaleza, porque el envoltorio pueda estar hecho de trigo…? Ni un simple sobre de ensalada, ni un queso, ni una bandeja de filetes…

 

Y no solo alimentos. También podría ocurrir con cualquier embalaje y otros objetos, puesto que los plásticos a base de trigo tienen muchas más posibles aplicaciones. ¿Te imaginas por ejemplo los niños pequeños, que lo chupan todo?

 Plásticos biodegradables ya disponibles

Hay muchas otras opciones posibles para la fabricación de plásticos biodegradables. Entre estas alternativas podemos encontrar:

  • Potato Plastic. Es un termoplástico biodegradable hecho de cáscaras de patata y agua. Puede descomponerse en la naturaleza en dos meses. Ha sido desarrollado por investigadores de la Universidad de Lund, en Suecia. Potato Plastic fabrica pajitas, cubiertos compostables y bolsas de sal con una mezcla de agua caliente y almidón de patata. El almidón procede de las pieles de patatas que desechan los establecimientos de comida rápida o de papas no aptas para la venta en supermercados.
  • Nuatan. Se trata de un material alternativo al plástico totalmente natural. Está hecho de almidón de maíz, azúcar y aceite de cocina. Ha sido creado por los diseñadores eslovacos Vlasta Kubušová y Miroslav Král. Es inocuo para los peces, biodegradable (tarda hasta 15 años en descomponerse) y soporta temperaturas muy altas.
  • Ooho. Es un envase comestible para líquidos, fabricado con extracto de algas marinas. Es más barato que el plástico. Ha sido creado por Skipping Rocks Lab, del Reino Unido. Según esta empresa, degrada en el medio ambiente en unas de seis semanas.
  • NatureFlex. Es una gama de biopelículas basadas en pulpa de madera recolectada en plantaciones sostenibles. Han sido desarrolladas por Futamura.
  •  Plástico biodegradable a partir de un compuesto de poliéster que, al reaccionar con el agua, se descompone en pequeñas moléculas no contaminantes. Ha sido desarrollado por investigadores de la Academia China de Ciencias, en su búsqueda por fabricar plásticos biodegradables capaces de descomponerse naturalmente en dióxido de carbono y agua.

 

Extraído de: Nueva amenaza para celiacos tuppers